Respuesta :

Uno generalmente no puede evitar ver el mundo a través de los ojos con los que ha sido entrenado para ver. Y yo no puedo evitar ver el mundo a través de la histeria de las ciencias exactas y por eso cuando veo política también veo ciencias exactas.


Hay una ley que, creo, si se la explicaran a mas de un economista -con todo el respeto que me merecen todos los economistas, dado que saben mucho mas que yo de economía por supuesto- quizá entendería que dentro de una caja negra puede haber miles de cosas, procesos de lo mas complejos e impredecibles, pero en el fondo lo importante es lo que entra y lo que sale del sistema.
Una ley irrevocable -o casi- del comportamiento de nuestro universo dice que: "nada se crea ni se destruye, todo se transforma". Alguna vez Lavoisier la enunció como "la materia no se crea ni se destruye, solo se transforma" y alguna vez alguien enunció el primer principio de la termodinámica y dijo "la energía no se crea ni se destruye, solo se transforma". Pero un tal Albert descubrió en una ecuación que había una relación entre masa y energía y concluyó que eran interconvertibles, así que cambiamos masa y energía por "nada" y "todo" y se terminó el problema.

¿Que tiene que ver esto con la política?
Buena pregunta.

Hoy leí en el blog de Tenembaum y Zlotogwiazda -sí, otra vez allá- que un lector del foro proponía algo asi -lo voy a simplificar-:
Si tenemos un panadero y un ganadero, y cada uno puede producir un kg de comida por día solo van a poder intercambiar un kg, para que entre algo extra de comida al sistema necesitamos que aparezca un tercer actor que viene de afuera y hace un aporte. En definitiva, para crecer necesitamos intercambiar puertas afuera.

Vamos a verlo desde el principio de conservación de la materia -dado que, como el dinero nuclear no existe, todavía Lavoisier tiene razon para el mundo macroscópico-.

1) El argumento de que es necesario intercambiar con el exterior para crecer es relativo. Pero aun admitiendolo, tiene un defecto de movida: no considera que la materia no se crea ni se destruye.