Un pulso sería la perturbación instantánea que provoca una onda. Cuando hablamos de ondas nos referimos a un tren de ondas, es decir, a una sucesión de pulsos (u ondas) que se propagan en una dirección y sentido determiandos.
Una ola del mar sería un pulso si fuese única. El oleaje típico del mar sería un tren de ondas, compuesto por una sucesión de olas, que podrían ser consideradas pulsos una a una.